
Mira a tu alrededor con los ojos del águila, a ella no se le escapan los detalles. Recorre un amplio, lento y fascinante recorrido todo vivido y luego vuela por el hoy de cada día, siente tanto la fascinación de la libertad, del vuelo de tu mente, como la de la plena conciencia de todo lo que cada HOY tienes o puedes tener. Agradece la pena, el dolor, el frio, el abre, la soledad, la tristeza, la incomprensión y la injusticia, pues solo gracias a ellos que podrás sentir el valor de todo lo bueno que te suceda.
Vive cada HOY, con su dosis de amor, felicidad, placer, ternura, afecto, deliciosas preparaciones y placeres de tus sentidos y espíritu. Enriquécete en ti mismo y por ti mismo y dale parte de ello a quien lo necesite de ti. No renuncies a tus sueños, vuela con ellos y luego hazlos realidad. En ese momento serás AGUILA y volando libre y majestuosamente por tu vida, serás parte del todo. Así irás, día tras día, sintiendo la vida en tu piel en tu corazón, en tu mente.
No olvides el sol, eres parte de él, es el hogar de las águilas que se atrevieron a volar.
No temas vivir, no temas volar. Vivir no es revelarse, es conocer los limite y llegar hasta ellos, es respetar a todo y a todos y exigir lo mismo para Ti, es querer y hacer, es emocionarse ante una flor , es deslizar una lagrima, es volcar lo que tienes, que está integrada y no permite su individualidad . Vuela raudamente cada hoy y haz crecer a los polluelos, tus sueños, para que sean parte de ti y de tu vuelo. No existe nada mas bello que la vida y los sueños. Quien tiene sensibilidad y sueños es libre.
No existe nada mas libre que el águila en el firmamento.